Termina el curso...
El año académico llegó a su fin. Cuando muchas personas se preocupaban de qué iban a hacer durante las vacaciones, Mendaur participaba en una de las mejores convivencias del año. Desde 21 de mayo hasta el 30 de mayo, un grupo de colegiales viajamos para residir unos días en el Centro de Apoio a Deficientes João Paulo II en Fátima, Portugal.
Entregas tu tiempo a otros
Los colegiales estuvimos a la disposición de personas con múltiples discapacidades durante una semana. Conviviendo y compartiendo con ellos durante todo el día: ayudar a las enfermeras a tender las camas de los mininhos, darles de comer, cantarles y pasearles por el patio. Al finalizar el día, aprovechando que estábamos tan cerca del Santuario de la Virgen de Fátima, salíamos del centro para visitar la Capelinha de la Virgen, lugar en donde Nuestra Señora se le apareció a los pastorcitos.
Vivir, durante una semana, en el Centro João Paulo II nos llevó a los colegiales a encariñamos no sólo con los mininhos, sino también a encariñarnos con todos sus colaboradores y hasta con el mismo lugar. En el Centro João Paulo II se vive el espíritu de caridad y entrega a los demás, Se vuelve contagioso, te consume, hasta convertirte en tu mejor versión.
Y siempre hay tiempo para el descanso
Los últimos dos días de la convivencia los colegiales viajamos a Galicia, en donde pudimos disfrutar de unas playas espectaculares y de las destrezas culinarias de don Eduardo. Fue una buena manera de terminar los diez días más especiales del año; comiendo, riendo y descansando por el esfuerzo hecho durante el año universitario.